Filtro de distorsión para simular derretimiento

El filtro de distorsión es uno de los más creativos a la hora de utilizarlo sobre una imagen, sobre todo si ésta se refiere a un objeto físico de la vida cotidiana. En este caso, os mostraremos un ejemplo de cómo distorsionar un reloj con el fin de que parezca que se está derritiendo. Esta práctica la podéis aplicar a otras imágenes y veréis qué espectaculares efectos podéis conseguir.

En primer lugar, es recomendable tener dos copias de la misma imagen, que abriremos con nuestro programa de Photoshop. A su vez, tendremos que tener abiertas las ventanas de Herramientas y de Capas, ambas disponibles desde el menú superior donde se indica Ventana.


Cogemos una de las imágenes para editar y seleccionamos la parte inferior, a ser posible donde coincidan líneas horizontales. Seguidamente vamos a acceder a la galería de filtros o bien directamente al filtro que nos interesa. El más apropiado para el efecto de derretir un objeto es el de la onda, por lo que acudiremos a Filtro > Distorsionar > Onda.



Nos aparece una ventana de edición del filtro de distorsión Onda. La primera opción es el número de generadores, que debe ser lo más inferior posible, para que el efecto realista esté más conseguido.

La longitud (mínima y máxima) permite establecer con mejor detalle la longitud de las ondas distorsionadoras. Es recomendable no aumentar en exceso estos parámetros, aunque sí serán los que más modificaremos.


La amplitud se modifica con los mismos parámetos que la longitud, si bien no será necesario aumentar demasiado los valores.

La escala de las ondas nos indica el porcentaje de distorsión, cuanto menor sea, menos se notará y, al contrario, conforme nos acerquemos al valor del 100%, la distorsión será más notable.

Por último, el tipo de onda a aplicar puede ser Sinuosidad, que será la menos agresiva, Triángulo y Cuadrado, estas dos mucho más notables que la anterior.

Cuando hayamos aplicado los valores necesarios para una distorsión de onda como a nosotros nos interese, debemos seleccionar OK. Ya tenemos la imagen distorsionada. Pero nos damos cuenta de que el contraste que hace que parezca que el objeto se derrite en contraposición con la imagen superior, hace que se note demasiado que se ha distorsionado sólo una parte de la imagen. Aquí entra en juego la otra copia de la imagen original.


Si hacemos una selección de la zona media, donde más se nota la distorsión, gracias a la herramienta del cuadrado de selección en la ventana de Herramientas, y seguidamente arrastramos esta parte a la imagen distorsionada, podremos ajustar ambas imágenes de forma que no se note tanto el efecto.


Con esta selección ajustamos mejor la parte inferior de la esfera y tenemos un efecto bastante creíble. Ahora vamos a modificar los bordes exteriores. Para ello vamos a utilizar un nuevo filtro, que se encuentra dentro de Filtro > Licuar. Previamente, guardaremos la imagen y la volveremos a abrir, para que así las capas se puedan editar a la vez como una sola.


Con la nueva imagen distorsionada abierta y una vez hemos entrado a Filtro > Licuar, podemos hacer uso de las distintas variables sobre los bordes. Una de las que más os servirá será la de Desinflar, que os permitirá empequeñecer las zonas en una aparente fusión y aumentaréis la sensación de derretimiento del objeto. Una vez obtengáis el resultado deseado, sólo tenéis que dar a OK y guardar el resultado.


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